Candyman (1992) es una de esas películas de culto que sobresalen por ser tan extrañas y por jugar con la mente del espectador, el cual no siempre sabe lo que está pasando. En esta reseña retro te voy a dar un poco de contexto sin spoilers que te servirá en caso de que aún no hayas visto este clásico; y más adelante (con advertencia previa), analizaremos algunos puntos importantes sobre Candyman y la explicación que te ayudará a entender mejor ésta y la secuela recientemente estrenada en cines.
La historia sigue a Helen, quien trabaja en su tesis sobre las leyendas urbanas y su impacto social. Su investigación de Candyman la lleva a Cabrini-Green, un vecindario marginado y peligroso cuyos habitantes no serán muy cooperativos ni amigables. Por supuesto, en el ambicioso camino a encontrar lo que necesita para su trabajo, Helen se encuentra con las consecuencias de perseguir al mismísimo Candyman y la explicación sobre su tétrico propósito incluídas.
Candyman (1992)
Director y guionista: Bernard Rose
Reparto principal: Virginia Madsen, Tony Todd, Xander Berkeley, Kasi Lemmons
Género: Horror
País: Estados Unidos
IMDb: 6,6
El origen de Candyman
Candyman está basada en «The Forbidden», un cuento corto en la colección Books of Blood de Clive Barker. Aunque la historia es muy similar, hay algunos elementos básicos que cambiaron y que hacen que Candyman sea tan representativa para la cultura estadounidense. Por ejemplo, el mismo Candyman, quien en la historia original era un hombre inglés y blanco.
La película se desarrolla en Chicago (en la versión original es en Inglaterra), así que el guionista y director Bernard Rose tomó al personaje y lo volvió parte del folklore estadounidense, contexto histórico incluido. Pues Candyman no sólo es un hombre negro con una trágica historia de racismo, sino que su leyenda sale de Cabrini-Green, un vecindario real con mucha relevancia cultural en el estado.
Cabrini-Green era un proyecto de vivienda pública de Chicago, pero debido a la falta de interés del estado más otros factores sociales, la zona se descuidó hasta convertirse en uno de los barrios centrales del crimen organizado. Un lugar perfecto para plantear a un personaje que nace del racismo y que sale de una zona marginada. Algo que hemos visto más adelante en producciones como Get Out (2017) de Jordan Peele, quien también produce y coescribe la secuela de Candyman que salió este año, o en Them (2021), la serie de terror original de Amazon Prime Video. Todas estas historias toman el horror que vive una persona discriminada por su tono de piel y lo traducen a una historia terrorífica. Claro que en Candyman hay un discurso menos «agresivo» debido a la época en la que se realizó, pero el miedo está presente en la película.
Por si tenías la duda, Cabrini-Green se ha ido reurbanizando y renovando con inversión privada.
Candyman no es tu película de horror promedio
Primero que nada, en caso de que no hayas visto esta película, retomaré el punto que mencioné antes: Candyman y la explicación de que es una película extraña. Si estás esperando ver tu película slasher promedio o algo similar a Leyendas urbanas (1998), te llevarás una gran decepción. Y es que sí, Candyman es un slasher y sí, trata sobre una leyenda urbana, pero la genialidad de este filme viene de lo impredecible y confusa que puede ser su historia.
HAZ EL QUIZ: ¿Sobrevivirías una película slasher?
Cuando se trata de películas de terror, las reglas están claras; el género está lleno de clichés que se deben de seguir o al menos criticar. Algunas películas tratan de romperlas y fracasan, pero luego están esas que se quedan en tu mente porque funcionan, como Candyman. Sin revelar mucho te diré que Candyman es uno de esos filmes que te dirigirá por un lado al inicio y termina siendo una cosa completamente diferente.
Además, sí tiene sus dosis atractivas de sangre e imágenes grotescas, aunque nada exagerado para el subgénero slasher. El tema verdaderamente interesante en este filme, es el factor psicológico. Pero no te voy a mentir, a veces el estilo de la película parece ser tan exagerado como una obra de teatro renacentista; sin embargo, ten un poco de paciencia y recuerda que es un producto de los 90.
Ahora sí, a partir de este punto, debes esperar spoilers.
Del terror real al sobrenatural
Está claro que Helen es una escéptica de la leyenda urbana, y durante su investigación, el peligro comienza a ser más humano que sobrenatural. Candyman en Cabrini-Green es un criminal que se aprovechó de la leyenda para causar terror entre sus habitantes y amigos. Aunque el Candyman humano es sádico, malvado y la cabeza del crimen organizado de la zona, nos hace dudar sobre si hay alguna conexión con el Candyman sobrenatural.
Y es que hay una diferencia enorme y muy notable en las historias que cuenta la gente. Cuando se trata de estudiantes privilegiados, Candyman parece ser parte de una leyenda de terror que entretiene a las personas y las reta a decir «Candyman» cinco veces frente al espejo. Pero cuando se trata de la policía o los habitantes de Cabrini-Green, Candyman es un terror real que los mantiene atrapados y constantemente temiendo por sus vidas… esto es lo que hace el crimen organizado.
Como espectador, al inicio no nos damos cuenta de la diferencia a pesar de las pistas tan sutiles que nos lanzan. Cuando Anne-Marie habla sobre cómo teme todos los días por su seguridad y la de su hijo, más adelante queda claro que está hablando del crimen organizado de la zona. De la misma manera, Jake teme al criminal cuando dice que no puede hablar de Candyman, aunque el espectador sienta la presencia del villano en el lugar. Los humanos y los elementos sobrenaturales se mezclan en la mente de Helen y del público.
Luego, cuando Helen es atacada y su agresor encarcelado, tanto nuestra protagonista como nosotrxs llegamos a la conclusión de que Candyman es en realidad un mito del que se aprovechó un criminal, nada más. Y ahí es cuando la cosa comienza a ponerse interesante. Candyman y la explicación de todas las cosas raras que pasan, no cuadran por completo.
¿Helen perdió la cabeza?
Inesperadamente, Candyman se aparece ante Helen, quien pierde el conocimiento y se sitúa en una escena del crimen. Todo parece indicar que fue ella quien cortó la cabeza del cachorro de Anne-Marie. Pero ¿dónde está el bebé? Es una bomba de situaciones que no veíamos venir.
Después, cuando Helen es llevada a una institución psiquiátrica, todo parece indicar que Helen imaginó a Candyman. La segunda parte de la película hará que los más escépticos piensen que Candyman es en realidad un thriller de terror psicológico sobre una mujer que asesina cuando pierde el conocimiento.
Sin embargo, no podemos negar el folklore de la zona con esos murales que parecen parte de un culto. Además, las siguientes apariciones de Candyman y la búsqueda de Helen por salvar al bebé, vuelven a echar el balón de lado de lo sobrenatural. Y ahora, despega la duda de si Helen es una reencarnación del primer amor de Candyman.
Otra lectura puede ser que, tal como dice Candyman y la explicación sobre sus nuevos planes, Helen ayudó a desacreditar su leyenda con la captura del jefe del crimen organizado. Así es como comienza el nuevo plan de Candyman para que Helen se convierta en su nueva pareja y que juntos formen parte de una nueva leyenda a la que la gente de Cabrini-Green pueda rendirle culto.
Así que la historia de Candyman termina resumiéndose en esto: ¿Son las leyendas urbanas reales o no? Depende del poder que le otorgue la gente. Y claro, un poco de sangre y terror suele hacerlo todo más interesante.
Aunque existen otras dos películas de Candyman, la secuela dirigida por Nia DaCosta las ignora, y por cierto, no hay mucha queja al respecto. Espero que hayas disfrutado esta reseña de Candyman y la explicación te ayude además a entender algunas partes de la secuela. Si le diste una lectura diferente al filme, no dudes en contarnos todo en nuestras redes sociales, ¡queremos leerte!