Explorar la cajita con recuerdos y abrir el álbum de fotos de la casa conlleva una ola de risas y buenos ratos, muchas veces dentro de un mar de nostalgia. Esta es la piedra angular del primer largometraje de Charlotte Wells que está nominado al Oscar a mejor actor. En esta reseña de Aftersun (2022) te platicamos más sobre esta cruda y enternecedora cinta (¡sin spoilers!).
La trama se sitúa en el inicio de los 2000. Sigue de cerca las vacaciones de Sophie, una niña escocesa de 11 años, y su padre, quien está a punto de cumplir 31 años. Aftersun es la ópera prima de Charlotte Wells, directora, escritora y productora escocesa. La cinta es protagonizada por Paul Mescal, Frankie Corio y Celia Rowlson-Hall.
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Aftersun (2022)
Dirección: Charlotte Wells
Guion: Charlotte Wells
Reparto principal: Paul Mescal, Frankie Corio y Celia Rowlson-Hall
Género: Drama
País: Reino Unido, Estados Unidos
IMDb: 7,8
Una cadencia narrativa sin prisa
Como un buen discurso, lento, con espacios y sin miedo al silencio, Wells nos narra una historia contemplativa y sin prisa. Apela fuertemente a la nostalgia por medio de imágenes muy cotidianas de una vacación familiar. Asimismo, nos ilustra la curiosidad e inocencia de una preadolescente a la par del amor y esfuerzo constante de un padre divorciado.
De esta manera, la cinta tiene un avance lento pero exquisito. Poco a poco las piezas que completan el rompecabezas caen eventualmente en su lugar. Aftersun nos entrega una imagen polarizada que consigue complementarse por medio de matices que se pueden sentir profundamente en el corazón expectante.
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Aftersun, merecedora a más de una nominación
Actualmente, Aftersun se encuentra nominada al premio Oscar a mejor actor. No cabe dudas que el impresionante trabajo de Paul Mescal debe ser reconocido. La dupla que hace con Frankie Corio entrega una interpretación abrasadora y que consigue poner los pelos de punta. No obstante, Aftersun merecía al menos una nominación más, a mejor película, mejor guion o mejor dirección.
La capacidad de Wells en el manejo de la composición para cada plano es brillante. A la par, Sophie irradia colores cálidos y brillantes, mientras que su padre se sumerge en tonalidades frías y obscuras. En ocasiones observamos a los personajes a través de reflejos, en otras ocasiones a través de un juego de perspectivas. Sin embargo, la base es siempre la misma: el contraste entre dos visiones distintas.
Con un fotograma, Wells nos transporta a la añoranza de recuerdos por medio de una re-observación y re-significación. El tremendo logro de Wells está en aterrizar sentimientos que son difíciles de exteriorizar y nombrar.
Mostrando lo inombrable
Aftersun busca respuestas en el pasado y nos habla sin necesidad de palabras. En primera instancia, el largometraje de Charlotte Wells puede ser recibido como una historia reconfortante y entrañable. Sin embargo, eventualmente consigue rompernos con la colisión de imágenes crudas y enternecedoras de la paternidad.
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