Cortometraje Brunch, sobre ser un millennial (la generación de cristal)

Cortormetraje Brunch, sobre la crisis de ser un millennial

Si eres unx millennial, seguro te han dicho que eres parte de la generación de cristal. Para generaciones más arriba de la nuestra somos un grupo de personas quejumbrosas que posan para el internet. Sin embargo, cada generación es una evolución de las anteriores... y ahora la nueva generación de cristal es la centennial. El cortometraje Brunch es una historia en stop-motion que, con mucho humor, nos da un respiro a la presión generacional.

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Esta historia fue creada por Marnik Loysen, un director, guionista y animador millennial (por si no era obvio). Loysen quería hacer una parodia de los estereotipos millennials, pero también buscaba redimirlos. Después de todo, crecer con el nacimiento del internet y sus alcances, nos hizo una generación con muchas desventajas, pero también con grandes e importantes ventajas.

«La idea de Brunch surgió después de varias conversaciones con compañeros sobre nuestra generación, los jóvenes millennials y las opiniones generalizadas sobre quiénes somos. […] Estoy orgulloso de mi naturaleza de ‘cristal’, no tengo ninguna duda de que el mundo es un lugar mejor con más aceptación y simpatía, sin embargo, soy plenamente consciente de que encajo en el estereotipo de ansioso-come-aguacate-hombre-niño.»

Marnik Loysen para Directors Notes

Sin más, te dejamos el cortometraje Brunch aquí, pero recuerda activar la traducción automática de YouTube si quieres verlo en español.

Brunch (2022)

Director y guionista: Marnik Loysen
Reparto principal: Joe Bolland, Maddie Rice, Phyllipa Flynn, David Schaal
Género: Comedia | Formato: Animación stop-motion
País: Inglaterra
Duración: 5 minutos y 27 segundos

¿Es malo ser parte de la generación de cristal?

En el cortometraje Brunch vemos al personaje principal convertido en un copo de nieve, y es que la expresión similar para «generación de cristal» en inglés es «snowflake» o como de nieve. Esto hace referencia a lo volubles que somos ante los problemas de la vida de acuerdo con generaciones pasadas, pero especialmente para los boomers.

Los tiempos han cambiado, las sociedad ha evolucionado para bien y para mal. Compararnos con nuestros papás dará como resultado frustración eterna y ansiedad constante. Pero ¿quién no lo ha hecho? Para la generación boomer, a los 25 la mayoría de las familias de clase media ya estaban casados, tenían dos hijxs y estaban pagando una casa propia. Para nuestra generación es imposible pensar en hijxs y comprar una propiedad. ¡Las plantas y los perros son más baratos, gracias!

Muchxs de nosotrxs preferimos gastar nuestro dinero en viajes, objetos de colección y otros placeres que nos dan menos responsabilidades. Es cierto, esto nos hace madurar un poco más lento, pero como dijo el protagonista de Brunch, «tampoco es nuestra culpa», ¿cierto?

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Por otro lado, la facilidad de comunicación y el acceso a la información que nos dio el internet, no lo tuvo ninguna otra generación anterior. Esto aceleró los movimientos sociales y la creación de comunidades con la misma causa. ¿Está mal quejarnos por lo que consideramos injusto? ¿Cuestionar las limitaciones de los constructos sociales? ¿Luchar contra la discriminación y el abuso? ¿Discutir sobre conciencia social?

Claro, el internet también nos volvió superficiales en muchos aspectos. Las redes sociales funcionan como una máscara ante el mundo, y todxs queremos mostrar nuestro lado más feliz y exitoso. Consumir ciertos alimentos y presumirlos en Instagram (como las tostadas de aguacate) se volvió más una moda y no tanto una verdadera preocupación por nuestra salud.

Lo interesante que expone el cortometraje Brunch es ese balance entre tomarse a broma los defectos milennials, y al mismo tiempo reconocer las limitaciones de otras generaciones. Después de todo, las generaciones están en constante evolución, y parte del crecimiento social viene gracias a que lxs jóvenes cuestionen las reglas y amplíen las libertades. Esta evolución es imparable, y ahora le toca a los centennials luchar por un mundo con mucha más inclusión, equidad y conciencia ecológica. Lo que nos toca a nosotrxs ahora, es comprender esa evolución y no hacer lo mismo que los boomers: llamarlos la generación de cristal sólo porque nos incomoda que rompan aún más que nosotrxs los límites sociales.

¿Qué opinas del cortometraje Brunch? Como siempre, queremos leerte en nuestra redes sociales y que nos recomiendes otras historias como esta.

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