Todas las personas que se enamoraron de Bridgerton y están esperando con ansias la tercera temporada (con la deseada historia de Penélope y Colin) van a querer ver la nueva miniserie de Netflix. En esta reseña de Queen Charlotte (La Reina Carlota, 2023) te contamos sin spoilers por qué tienes que verla y qué la hace tan diferente a las demás. Esta miniserie aún no forma parte de los libros de Julia Quinn, pero muy pronto la autora lanzará la novela.
Queen Charlotte es un spin-off de Bridgerton y, a través de saltos en el tiempo, nos muestra la juventud y actualidad de este personaje no muy querido. Sin embargo, gracias esta historia de origen, te aseguro que aprenderás a ver a esta Reina berrinchuda bajo una lupa muy diferente. Y aún hay más, pues Charlotte no es el único personaje que conocemos mejor. Violet, la madre de los Bridgerton, y Lady Danbury también nos muestran su lado más vulnerable.
HAZ EL QUIZ: ¿Qué personaje de Bridgerton eres según tu personalidad?
Tengo que aceptar en esta reseña de Queen Charlotte, que al ver los primeros episodios creí que esto sería un poco más de los mismos clichés de Bridgerton (que nos encantan, sí, pero que no traen nada nuevo). Y sí hay un poco de eso, pero Queen Charlotte va más a allá de lo que va Bridgerton. Se tratan temas de sexualidad, amistad y autonomía femeninas, de homosexualidad y de salud mental mucho más profundamente. Además, seguro que te removerá más sentimientos (quizá incluso te saque una lagrimita) que la serie principal.
Pero antes de continuar con esta reseña de Queen Charlotte, te dejo el trailer aquí:
La Reina Carlota: Una historia de Los Bridgerton (Queen Charlotte: A Bridgerton Story, 2023)
Creadores: Naomi Alderman, Sarah Quintrell y Raelle Tucker
Reparto principal: India Amarteifio, Golda Rosheuvel, Corey Mylchreest, Arsema Thomas
Géneros: Drama
País: Estados Unidos
IMDb: 7,4
La historia de la Reina Charlotte
En Bridgerton la Reina está muy alejada del público de la serie. Es superficial, berrinchuda y la principal causa de estrés para la mayoría de nuestros personajes favoritos. Esta vez conocemos su propia historia de amor que, como todas las demás, no es fácil ni está libre de los horribles abusos de la alta sociedad inglesa.
Gracias a esta serie nos es mucho más fácil comprender y empatizar con la Reina, y no deja de ser una mujer rebelde que no acepta opresión de nadie. Comprendemos mejor por qué le da tanta importancia a la corona y al linaje, y entendemos lo solitario que puede ser convertirse en la Reina. Además, volvemos a ver a Golda Rosheuvel en su papel, pero ahora complementamos con la versión joven interpretada por India Amarteifio, que lo hace muy bien.
Pero aunque la historia de la Reina Charlotte y el Rey George es muy hermosa y disfrutable, tengo que aceptar que para mí fue Lady Danbury quien se robó la serie. Y es que también Adjoa Andoh regresó para hacer su personaje lleno de fuerza e independencia femenina, pero ver su contraparte joven interpretada por Arsema Thomas, fue fabuloso.
Lady Danbury tiene un desarrollo mucho más profundo. Es el personaje que se echa las mejores frases, que guía a los demás e incluso nos guía como público. Definitivamente me hubiera gustado ver mucho más de ella.
Inclusión forzada Normalización a la inclusión
Mucho se ha criticado pero (afortunadamente) también alabado la inclusión en la serie de Bridgerton. En esta serie el tono de piel o características físicas no importan al momento de representar un personaje de la alta sociedad de la Inglaterra del siglo XIX. Es por ello que tenemos a Reinas, Duques, y demás burgueses ingleses con ascendencia africana y asiática.
Aunque las novelas de Julia Quinn hacen cierto trabajo por abrir tabúes (particularmente los de temática femenina), Shonda Rhimes, creadora de la adaptación de Bridgerton, se dio a la tarea de normalizar esta inclusión. Y la realidad es que, a pesar de que los haters llamen a esto «inclusión forzada», no afecta en la narrativa ni lastima a la historia que, aunque está basada en ciertos personajes y épocas reales, no pretende apegarse por completo a la horrible realidad de entonces.
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Ahora, Julia Quinn y Shonda Rhimes, se unieron para dar un paso más adelante a la inclusión y a abrir una historia de época a los temas que en ese entonces eran un tabú, como la independiencia y el deseo sexual femenino, además de la homosexualidad y la salud mental. El resultado: Queen Charlotte, una historia romántica que te hará sentir bien y que disfrutarás muchísimo si te gustan las historias de época.
Y lo más importante, que normaliza el hecho de que el entretenimiento puede darse licencia de ser más inclusivo de lo que es la triste realidad.
Aún hay mucho por hacer
Desde luego, no voy a decir que Bridgerton y Queen Charlotte son series perfectas. Al final sigue siendo una serie feel good que toca todos estos temas problemáticos de manera muy rosa e idealista. Pero eso es justo lo que queremos de una feel good, ¿no?
Además, por mucha inclusión que haya, es cierto que (particularmente su primera temporada) tuvo varios errores al tratar temas delicados. Por ejemplo, exagerar visualmente la sangre menstrual, o incluso romantizar que una mujer abuse sexualmente de un hombre.
Quinn y Rhimes han aprendido de estos problemas y han ido mejorando la serie, lo que se agradece mucho a pesar de que aún queda mucho por hacer. Aún así, tenemos que reconocer que el alcance que ha tenido esta saga es un paso muy importante para que el entretenimiento pierda esos elementos heteronormativos, racistas y misóginos.
¿Tú qué opinas de la saga Bridgerton? Espero que esta reseña de Queen Charlotte te anime a darle una oportunidad a la serie. Como siempre, queremos que nos compartas tu opinión en redes sociales.