La respuesta más frecuente que dan los niñxs cuando se les pregunta qué quieren ser de grandes suele ser “astronauta”. ¿Por qué casi todos quieren serlo? Uno de los sucesos más trascendentes en la Historia es la llegada del hombre a la Luna, lo que permeó poderosamente en el imaginario de millones de pequeñxs alrededor del mundo. En esta reseña de Apolo 10 ½: Una infancia espacial (Apollo 10 ½: A Space Age Adventure, 2022), te contamos -sin spoilers– cómo Richard Linklater retoma este tema para su más reciente película.
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El director de cintas como School of Rock, Boyhood y la muy recomendable Where’d You Go, Bernadette, nos traslada esta vez a finales de los años 60 en una cinta con tintes autobiográficos que nos habla de un niño que es reclutado por la NASA para una misión espacial.
Apolo 10 ½: Una infancia espacial (Apollo 10 ½: A Space Age Adventure, 2022)
Director y guionista: Richard Linklater
Voces: Jack Black, Bill Wise, Lee Eddy
Géneros: Animación, Aventura, Drama, Ciencia Ficción I Formato: Animación Rotoscopia
País: Estados Unidos
IMDb: 7,3
Sinopsis: Un hombre comparte fragmentos de su vida como un niño de 10 años en Houston en 1969 y entrelaza historias de nostalgia con un relato fantástico de un viaje a la Luna.
Houston, tenemos un problema
Apolo 10 ½: Una infancia espacial es la narración desde la voz adulta -interpretada por Jack Black- de aquel niño llamado Stanley, quien vivió muy de cerca el icónico momento. Además de la llegada a la Luna, la cinta hace un recorrido por todo aquello que fue trascendente en esa época, así como los usos y costumbres de la sociedad norteamericana.
Por otro lado, está repleta de nostalgia por aquellos programas televisivos que todavía disfrutamos los niñxs que crecimos en las siguientes dos décadas y la música que sigue siendo idolatrada por las nuevas generaciones. Asimismo, se habla de momentos históricos como la guerra de Vietnam, la Guerra Fría y el movimiento contracultural pacifista hippie.
En un afán de abarcar todos los temas para la construcción del contexto histórico, esta cinta pareciera más bien un documental, por lo que puede tornarse tediosa en ciertos momentos. Sin embargo, funciona muy bien para dar un repaso por todo aquello que sentó base para ser quiénes somos ahora y descubrir cómo fuimos influidos por todos estos acontecimientos -para bien o para mal-.
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Cabe destacar que la técnica de animación utilizada en Apolo 10 ½: Una infancia espacial se conoce como rotoscopia, la cual consiste en crear secuencias animadas al calcar o trazar sobre un metraje live-action fotograma a fotograma. Por cierto, el director ya había probado esta técnica en dos de sus producciones anteriores: Waking Life y A Scanner Darkly.
Dedicada a tu niñx interior
Pese a ser una cinta animada, en esta reseña de Apolo 10 ½: Una infancia espacial nuestro veredicto es que definitivamente no es para niñxs pequeños, sino para alimentar la añoranza de aquellos que crecimos antes del nuevo milenio. Por ello, sí te recomendamos que la disfrutes en Netflix y empieces desde ya las celebraciones del Día del Niñx.
Vía: Netflix
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