Darren Aronofsky es uno de los artistas más polémicos de la industria cinematográfica, y esta vez se une a A24 con otra historia impactante. Ahora nos trae una película que divide a la crítica en cuanto a la calidad del mensaje, pero que la une por su calidad actoral. En esta reseña de The Whale (La ballena, 2022), te contamos sin spoilers por qué ha sido un filme tan complicado de procesar. Y ya que esta es una película fácil de spoilear, mantendremos la trama ambigua y apegada al trailer.
The Whale sigue a un maestro que entra en la categoría de obesidad mórbida y que se encuentra recluído en su departamento. Mientras se esconde del mundo, intenta reconectar con su hija adolescente y lidiar con su salud en compañía de su amiga enfermera. Conforme avanza la historia, comprendemos la naturaleza de sus pocas relaciones sociales y los motivos que lo orillaron a su condición actual.
The Whale (La ballena, 2022)
Director: Darren Aronofsky
Guionistas: Samuel D. Hunter
Reparto principal: Brendan Fraser, Sadie Sink, Hong Chau, Ty Simpkins
Géneros: Drama
País: Estados Unidos
IMDb: 7,9
Premios, premios por todos lados
Lo que le asegura a The Whale al menos una estatuilla (pero probablemente tendrá varias) no es sólo que pertenece a un director como Darren Aronofsky, sino que además cuenta con el polémico (y amado) regreso de Brendan Fraser y un tema socialmente muy complicado. Nuestro querido Fraser hace un papel que se gana nuestro corazón desde los primeros minutos, pero que tiene su momento cumbre más adelante. Es muy probable que toda la historia personal del actor influya en que se lleve el premio, pero su actuación sí lo merece.
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Por otro lado, Sadie Sink dejó muy atrás Stranger Things y se convirtió en la hija odiosa y llena de resentimiento. Y tengo que decir en esta reseña de The Whale, que su actuación sí estuvo a la altura del filme. En general todxs hicieron un excelente trabajo actoral, pero en esta ocasión no pude dejar de pensar en Fraser y Sink.
Por otro lado, tenemos un tema muy complicado de exponer (y aún más de procesar cuando no lo vives) en una era en que la conciencia social se hace más presente que nunca. La depresión y sus trastornos alimenticios son un tema serio, pero exponerlos sin apelar a la gordofobia es muy difícil. Y creo que Aronofsky no lo consiguió.
Lástima, shock y morbo
Comencemos por aclarar que este filme está basado en la obra de Samuel D. Hunter, guionista de la película. El escritor ha dicho que The Whale está basada en su propia experiencia de depresión y desórdenes alimenticios. Sin embargo, después de ver esta película me cuesta creer en la empatía que este hombre delgado pudiera tener a una persona como la que escribió.
Cuando el cuerpo de una persona está fallando debido al exceso de peso, es sin duda una enfermedad. The Whale retrata una realidad muy espinosa en la que los desórdenes alimenticios se unen a la depresión y crean una ballena humana (atención a las metáforas incluídas en las referencias de Moby Dick). Sin embargo, el estilo de Aronofsky nunca es superficial ni compasivo; el director siempre ha apelado por provocar shock e impresionar al público con imágenes muy viscerales.
Esta vez explota el cuerpo y el trastorno de una persona para provocar lástima, incluso asco en ocasiones. Y antes de que me digas que «depende del ojo con que se vea», centrémonos en las intenciones artísticas del filme. Se creó una prótesis muy específica llena de detalles físicos que sin lugar a duda impactarían a lxs espectadores promedio. El personaje es abusado por casi todas las personas a su alrededor. Todo esto unido a una escena muy gráfica en donde se retrata el trastorno alimenticio de una manera que vuelve a la comida en algo grotesco, es explotar el problema. Sin contar que no existen soluciones compasivas al conflicto del personaje.
Aronofsky apela a la gordofobia social para provocar lástima, en lugar de apelar a los sentimientos humanos para provocar compasión.
Las complejas relaciones humanas
En esta reseña de The Whale, quiero dejar en claro que no estoy diciendo que este filme sea una bazofia. Como todo buen arte, hace lo que debe hacer: provocar el diálogo social y el análisis personal.
Y una de las cosas que hace muy bien es desglosar las relaciones sociales del protagonista y su propio duelo cargado de culpa. Como nosotrxs no vivimos los sucesos anteriores al filme, nos encontramos alejados de la realidad de los personajes. Pero conforme se van revelando y nos vamos enterando, nuestra simpatía llega a todos los personajes y no sólo al principal.
La relación más compleja es esa de un padre que vive con culpa y su hija resentida. No daré mucho detalle porque creo que la revelación de la historia es una importante experiencia en lxs espectadores; sin embargo, el retrato de esta relación y el gran final del filme me parecen dignos de una historia tan desgarradora.
Espero que esta reseña de The Whale te anime a darle una oportunidad a la película. Y es que no importa si la amas o la odias, vale la pena verla si te gusta analizar y dialogar sobre este tipo de tramas tan difíciles de procesar. Después de verla, ¡recuerda contarnos tu opinión en nuestras redes sociales!
