Desde hace ya un tiempo, el subgénero found-footage es caracterizado por muchos cinéfilos como el camino más fácil para hacer terror. Aluden que, mientras otros subgéneros se desviven para meterse con la psicología del espectador, el metraje encontrado solo utiliza un par de screamers baratos en VHS. Aunque la crítica suele aplicar, aún existen películas que utilizan tanto el terror psicológico como el terror visual del found-footage para crear grandes historias. Es el caso del director Joel Anderson, que sacudió el año 2008 con una terrorífica historia que sigue dando de que hablar. Acompáñanos en nuestra reseña de Lake Mungo (2008) para saber más.
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Lake Mungo (2008)
Dirección y guion: Joel Anderson
Reparto principal: Rosie Traynor, David Pledger, Martin Sharpe, Talia Zucker
Género: Terror
País: Australia
IMDb: 6.3
Sinopsis: Una familia se encuentra en proceso de duelo por el fallecimiento de su hija, Alice, quien se ahogó en un lago. Cuando deciden investigar a fondo su deceso, se encuentran con todo tipo de sucesos paranormales que no los dejarán en paz.
Un aura indefinida
Una de las formas más efectivas de generar terror es causar sorpresa. Y no hablamos de crear un buen screamer o plot twist, sino de innovar desde las raíces de la película, es decir, desde sus temas mismos. En los últimos años, este logro se hizo prácticamente inalcanzable para los directores del género, ya que el público se está decantando por producciones más y más encasilladas en un tipo de historia específica e indivisible.
Fuente: Mungo Productions
Por suerte, las nuevas tecnologías nos dejan regresar al pasado, específicamente a las películas de terror estrenadas entre el 2000 y el 2010, que no tuvieron miedo de experimentar. En el catálogo de esos años, se pueden encontrar historias de terror mezcladas con comedia, drama, sátira, e incluso combinaciones de todos esos géneros y más. Allí se aloja también Lake Mungo, una trama que sigue los lineamientos base del metraje encontrado, pero que también se asocia fuertemente con esa rama del género dramático que nos deja el corazón estrujado por varios días.
La fuerza de lo estático
De todas formas, no hay que dejarse engañar. Lake Mungo es, sin duda alguna, una de las películas más escalofriantes, tanto de terror como de metraje encontrado. Mientras ablanda al espectador con una historia familiar cruenta e injusta, aprovecha para rematarlo con imágenes espeluznantes que solo pueden verse con el zoom que nos provee la instancia narrativa. Así, el público no tiene respiro de la tragedia que se deshilvana ante sus ojos.
Además, la película procede con un ritmo y tono absolutamente estáticos, casi idénticos a las psiquis de la familia de la fallecida, carentes de felicidad y pulsión de vida. Los elementos y herramientas de la trama se unen para formar un todo quieto, que siempre deja lugar para el asombro y el consecuente susto sin precedentes del espectador. De esta manera, Lake Mungo configura una identidad que no solo le habla al público, sino también a los miedos más ocultos de cada persona que mira la película.
Esperamos que te haya gustado nuestra reseña de Lake Mungo. ¿Qué opinas de las películas de metraje encontrado? Queremos leerte en nuestras redes sociales.
