Ha llegado la época del año en la que se respira amor y paz en todas partes, incluyendo -obviamente- a las taquillas y las plataformas, es ese momento en que la armonía se percibe en el aire. Pero qué pasa si tu idea de amor y paz es un poco retorcida y tiene que ver más con lo gore. Aquí te presentamos la reseña de Noche sin Paz, la película que muestra el otro lado de una de las fiestas más queridas del mundo: una más violenta e irónica.
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Noche sin Paz, dirigida por Tommy Wirkola, narra la historia de la adinerada familia Lightstone quien es sorprendida por una banda de mercenarios que interrumpe su Nochebuena. El plan de los delincuantes se verá afectado cuando el mismísimo Santa Claus -en su versión más violenta- protegerá a la familia.
Noche sin paz (Violent Night, 2022)
Dirección: Tommy Wirkola
Guionistas: Patrick Casey, Josh Miller
Reparto principal: David Harbour, John Leguizamo, Alex Hassell, Edi Patterson
Género: Thriller, Comedia, Acción
País: Estados Unidos
Una Navidad con acción
En estas fechas estamos acostumbrados a ver contenidos sobre las emociones y sentimientos que trae consigo la Navidad, estas producciones se abordan desde diferentes perspectivas ya sea romántica, comedia o familiar. En este caso los guionistas crearon un ambiente navideño con más acción y crítica a partir del protagonista de la temporada: Santa Claus. Un personaje irónico, hábil, rudo y fuera del cliché.
Esta película es una mezcla entre: Duro de Matar, Mi Pobre Angelito, El Grinch y John Wick que resulta en una película de acción navideña con una premisa infantil y la violencia de la adultez. En esta reseña de Noche sin Paz queremos resaltar que se trata de una sátira de lo que significa la Navidad para muchos: una excusa para el consumismo.
La cinta es patéticamente violenta, poco original, carente de lógica, políticamente incorrecta, con un mensaje ambiguo y eso es justo lo que quiere ser. No aspira a nada más y es ahí donde radica su encanto en su desfachatez en contar lo que quiera y como quiera sin importar las susceptibilidades sociales. Construye su trama desde el origen del mito, reconstruye la historia de Papá Noel y utiliza la magia con los elementos fantásticos para crear la tensión y la rudeza que hacen únicas las secuencias de pelea. Aunque puede burlarse de las cosas absurdas de la Navidad, no deja de contar la historia alrededor de la ilusión y encanto que rodea al protagonista.
Una auténtica película navideña
A pesar de ser un filme violento y lleno de sangre es una genuina película de Navidad. El protagonista es un hombre que ha perdido su propósito en el mundo, no tiene ilusión o interés por su trabajo. Los niños se han vuelto malcriados y no aprecian ni valoran los regalos que les entrega. Conforme avanza la trama y masacra a los «chicos malos» va recuperando la confianza en sí mismo y por lo tanto también en la Navidad.
Cada personaje representa un cliché de las películas navideñas que va desde lo ridículo hasta lo patético y conforme se desarrolla la cinta -tal como pasa con Santa Claus- ellos también cambian. Claro, el filme no deja de ser una sátira que se burla de la festividad y todo eso que la hace mágica. Gran parte de esta idea la sostiene David Harbour que hace un excelente trabajo al mostrarnos a un protagonista que es consciente de su deterioro, mientras que le agrega algo de carisma y una peculiar personalidad a Papa Noel.
Es una comedia negra de acción ultra mega violenta, pero en el fondo es una película con buenas intenciones que busca darle un giro a este subgénero. Tal vez no es una cinta que disfrute toda la familia, pero sin duda es capaz de contagiar el espíritu navideño. Es perfecta para comenzar la época navideña y no echar de menos al halloween.
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