Esta es una colaboración de Mark Cubillo
Cuando ‘Empire Strikes Back’ llegó a cines y todos celebraban su éxito, un pequeño virus se gestó en las sombras de una coladera o un cuarto de algún chaquetero. Al principio no era más que un chiste pero nadie pensó que terminara así.
Fanaticus Extremis Warsiano, este conjunto de nematodos mandaron en ese entonces una cantidad de cartas a Fox amenazando con quejas y reclamos, esto sería un micro reflejo de lo que sucedió hace 2 años con otra cinta de Star Wars. Digamos que fue como el teaser de lo que pasó hace 2 años.
Las precuelas de Star Warse de hace 20 años fueron el caldo de cultivo que propagó esta enfermedad. Esta maldad autodestructiva generó tal cantidad de consecuencias que, por sólo comentarles una, Ahmed Best, mejor conocido como Jar Jar Binks, casi se nos avienta de un puente.
Llegamos a la época de las redes sociales, donde todo mundo es erudito y el máximo conocedor del cine. ¿Y qué es lo que pasa? George Lucas, más harto por la fanaticada que por el amor a su bebé, hace el deal que lo definiría todo: una nueva serie de episodios para la saga Star Wars. Y entonces, estos Fanaticus Extremis explotaron y no pudieron ser callados con nada.
Así llega ‘The Force Awakens’ una cinta que respondió a los criterios de la fanaticada, y por irse a la segura fue un mir#@. Aunque muchos (incluyéndome) la criticaron en su momento por irse a la segura, tiene muchas cosas rescatables, como uno de los personajes favoritos de toda la saga; así que, misa no problem.
Y señoras y señores llega ‘The Last Jedi’, con un tío al que le vale el qué dirán. Rian Johnson agarra y saca una propuesta completamente única a todo lo que Star Wars hizo en toda su historia. Rompe con lo que tradicionalmente se nos había presentado pero respetando las reglas. Créanme, podría hablar días de por qué creo que esta es la mejor de todas las películas de la saga. Pero en cuanto llegó, Star Wars murió.
El hervidero, el odio, los debates a muerte, que si Disney, que si Kennedy que si J.J., que si Johnson… terminaron por destruir una saga que no debió responderles a estos niños chillones. Esos que clamaban por ver una adaptación de esa caótica serie de libros nerdos que hoy se conocen como Star Wars Legends y no cuentan en el canon legal. (Gracias a Cthulhu por esto.) O de plano, pedían no tener mas cintas; señores, estamos en un mundo capitalista, todo es eterno mientras de pasta.
En fin, el hervidero llegó a las salas de Lucasfilm, fue tocado en juntas creativas y consternados, intentaron responder a las quejas. Pero ¿qué pasa cuando intentas complacer a los que se quejaron? Que alguien le pregunte a Warner como le fue con DC; es el ejemplo más reciente.
‘Rise Of Skywalker’ es una cinta que busca complacer a estos chillones y termina por no poder cumplirlo, simplemente porque nunca los tendrás contentos. Es un viaje de acción que no para, pero de irse a la segura en todo momento. A tal punto que no hay sorpresas, excepto quizás por cierto personaje que nunca lo vi venir.
Es una cinta brutalmente ejecutada, la música, los efectos, las actuaciones, la fotografía, todo está hecho maravillosamente; pero es difícil saber qué es lo que querían contar, contra qué es lo que querían borrar.
El ritmo es imparable, la historia es un caos complejo que desafortunadamente no terminas por digerir. Y es que cada decisión te la meten en friega y ¡pum! a lo siguiente. Me hace pensar en si no le faltará una hora más de metraje para tomarse un respiro. Esta es la consecuencia de intentar complacer a estos niñitos.
Me gusto el arco de Kylo aunque de explotarlo a fondo o con más calma, habría estado brutal. Rey termino siendo lo que se esperaba que fuera, ninguna sorpresa aquí… de nuevo, consecuencia del intento de borrón de ‘The Last Jedi’. Es triste que nadie entendió que el personaje mas interesante debía ser este, Rey.
Entiendo que esta película es una respuesta a todo el backlash que se recibió y que continuarán recibiendo, porque el fan nunca sabe qué quiere, así que hacerle caso es matar toda posibilidad de creatividad y originalidad que puedes llegar a tener.
Se terco, se fiel a tu historia, a lo que quieres contar y de la forma en la que quieres contarla y nunca le hagas caso a tus fanáticos, NUNCA. El final pudo haber sido más impresionante, pero al menos deja satisfecho al espectador.
En fin, es el final de la nueva trilogía; porque no, no se siente como el final de saga. No toca elementos cruciales para unir todas en un solo capítulo, pero si dejan de llamarse Episodios a partir de aquí, no tendríamos problema.
Es una cinta buena y bastante, pero al irse a la segura, o a la extrema segura, y aplicar esa especie de borrón, decepciona un poco. Hoy tienen calmados a los fanáticos extremos con ‘Mandalorian’, mañana estarán destruyendo Episodio IX, así de simple. Y la próxima semana querrán el cadáver de Taika Waititi por lo que haga con el final de ‘Mandalorian’.
Este es mi veredicto: La trilogía original es una joyita, las precuelas tienen la mejor historia Star Warsiana y las secuelas son las mejores cintas en general.
El Episodio IX no entrará en el top 5 de cintas de Star Wars, pero es buena. Así a secas, porque no hay riesgos y las coreografías no brillan esta vez. Al gran J.J. le falló considerar el ritmo de la edición para que sus peleas no sean demasiado largas o monótonas. El tío es un genio en su mundo, pero no tiene ese feeling que se necesita para crear duelos icónicos.
Necesito verla mínimo un par de miles de veces más para absorber ciertas decisiones que me siguen sin tener sentido, quizá algún día cambie esta percepción como lo ha hecho ‘Phantom Menace’ estos últimos años. Pero como siempre, la disfrute como nunca.