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Reseña Retro: La sombra de una duda, Hitchcock y su creación favorita

Reseña de Shadow of a Doubt

En plena entrevista, aquella declaración de Alfred Hitchcock sorprendió hasta al propio Truffaut. El director de The 400 Blows (Los 400 golpes, 1959) y admirador de su obra, lo retrucó objetando que, si solo nos quedase The Shadow of a Doubt (La sombra de una duda, 1943) como exponente del estilo hitchcockiano, entonces dicha forma de hacer cine carecería de una definición fiel. Después de todo, asociamos más al maestro del suspenso con la famosa escena del baño y el cuchillo, o el miedo a las alturas de James Stewart que con otra cosa.

Aunque en ese reportaje Alfred no otorgó un argumento concreto que respaldara su favoritismo, años más tarde su hija Pat Hitchcock revelaría que a su padre le entusiasmaba enormemente la idea una película donde pudiese inundar de malicia al más tranquilo de los pueblitos. La idea de insertar terror en donde no se lo espera y no se lo anticipa. Romper con la inocencia.

Entender como ese deseo acérrimo se plasmó por completo en la cinta que hoy cubrimos, implica desglosarla en sus procedimientos. Acompáñanos en esta reseña de Shadow of a Doubt para entender de qué hablamos.

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La sombra de una duda (Shadow of a Doubt, 1943)

Director: Alfred Hitchcock
Guión: Gordon McDonell, Thornton Wilder
Reparto principal: Teresa Wright, Joseph Cotten, Macdonald Carey, Patricia Collinge
Género: Cine Negro, Thriller
País: Estados Unidos
IMDb: 7.8

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Otra vez MacGuffin

Si de los importantes aportes de Hitchcock al hacer cinematográfico hablamos, es indispensable mencionar el uso del MacGuffin. Este plot device consta de un elemento inserto en la trama que, al principio, parece ser de total importancia, pero que cerca del tercer acto pierde su protagonismo. Gracias a él los personajes dan sus primeros pasos en la historia, y luego ramifican sus desarrollos en otros sentidos mas trascendentes, dejando atrás la razón inicial de sus busquedas.

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En Shadow of a Doubt el MacGuffin es algo menos tangible que los $40.000 dolares en Psycho (Psicosis, 1960) o el collar de Vertigo (1958). Acá el aparente objeto protagonista es la creencia del personaje principal, Charlotte Newton, de que ella y su tío están unidos por una especie de conexión telepática. Cuando Charlie decide escribirle para que la visite y se entera de que él ya había decidido venir, se aferra fuertemente a esa idea. Sin embargo, la historia continua con otro rumbo que poco tiene que ver con la telepatía.

Dualidades y simetrías

Otra marca ineludible del sello hitchcockiano es la construcción de cintas teniendo como base el número dos. Gracias a dicha cifra el director dio vida cinematográfica a los tradicionales opuestos arquetípicos, como el bien y el mal, la verdad y la mentira, la libertad y el aprisionamiento. Por ejemplo, como señaló Hitchcock en la famosa entrevista con Truffaut que posteriormente se convirtió en libro, Rear Window (La ventana indiscreta, 1954) es una cinta que postula como opuestos a un James Stewart preso de su silla de ruedas y a una Grace Kelly libre de moverse a donde quiera. Esas condiciones tan distintas generan choques y acuerdos entre los dos personajes que llevan adelante la trama.

En esta reseña de Shadow of a Doubt te contamos que la película posee varios guiños al número dos. Algunos más periféricos, como los personajes mellizos, y otros muy notorios, como el motivo central de la historia: el tío peligroso que esconde secretos de muerte y su sobrina que lo idealiza inocentemente, rehusándose a creer que el último haya cometido algún mal. Más tarde, los blancos y negros se vuelven grises. Ella comienza a caer en la realidad y su tío peca de inocente al creer que su sobrina sería incapaz de injuriarlo.

El maestro del suspenso

No es ninguna novedad que a Hitchcock se lo cita más con este apodo que con su propio nombre. No, él no patentó el suspenso, pero sus formas de manejarlo fueron, son y serán exponentes modelo. Su uso del género consistía en hacerlo presente con anterioridad al hecho criminal rimbombante. Es decir, antes de que el largometraje alcanzase el climax con un asesinato o similar, había un reguero de indicios que indicaban los desenlaces trágicos que vendrían.

Hitchcock adelanta sus desenlaces desde el comienzo.
Fuente: Universal Pictures

Si el espectador es lo suficientemente atento a los detalles, el final de Shadow of a Doubt se hará claro incluso antes de que termine la película. Hitchcock ya mencionó en varias entrevistas cuales eran los factores que debían analizarse con atención. El más significativo de ellos es el humo negro que sale del tren donde viaja Charles. Pero también son indiciales las conversaciones del vecino y el padre de Charlie acerca de como cometer un asesinato sin ser capturado. Una de las canciones del soundtrack de la cinta, Die lustige Witwe (El vals de la viuda alegre, 1905), también dice mucho al respecto partiendo solo desde su título.

Esperamos que esta reseña de Shadow of a Doubt haya demostrado por que Hitchcock se encuentra entre los grandes directores de todos los tiempos. ¿Cual es tu película preferida de él? Queremos leerte en nuestras redes sociales.

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