Como puede verse en sus múltiples adaptaciones cinematográficas, la literatura de Roald Dahl siempre es un material ideal para llevar a la pantalla grande. Cada una de sus historias rebosa de fantasía, personajes memorables, lecciones morales y tramas aptas para niños y adultos por igual. En el cine, además, resaltan los hermosos detalles visuales que en sus libros quedan limitados a la imaginación del lector. Por eso, si pensamos en cineastas aptos para dirigir adaptaciones de los relatos de Dahl, Wes Anderson es uno de los primeros candidatos ¿Quién podría ser más competente para dirigir un mundo hecho de pequeñas partes? Gracias a esa mente adelantada que lo caracteriza, el director ya lo había pensado hace catorce años. Acompáñanos en esta reseña de Fantastic Mr. Fox (2009) para saber más.
Mr. Fox es todo lo que se esperaría de un zorro antropomorfizado. Elegante, astuto, inteligente y sarcástico. Debajo de esta fachada, su instinto animal late con violencia, y lo insta a llevar adelante una cacería que pondrá en peligro la vida que conoce.
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Fantastic Mr. Fox (2009)
Dirección: Wes Anderson
Guion: Wes Anderson, Noah Baumbach
Reparto principal: George Clooney, Meryl Streep, Jason Schwartzman, Bill Murray, Wallace Wolodarsky, Eric Chase Anderson
Géneros: Aventura, Comedia | Formato: Animación stop-motion
País: Estados Unidos, Reino Unido
IMDb: 7.9
El carácter humano
Como lo haría más tarde en Isle of Dogs (Isla de perros, 2018), Wes Anderson antropomorfiza ciertos rasgos de los animales. Se adentra en su universo para mostrarnos como razonan, se organizan y actúan en el día a día. Sin embargo, el caso de Fantastic Mr. Fox es más interesante que el de la otra película recién mencionada, porque en la última no se enfatiza en la construcción de un mundo por parte de los perros. En cambio, su primera película animada proyecta a los animales del campo estadounidense como una civilización.
Los adultos tienen trabajos, casas que mantener y niños que enviar a la escuela. Aunque sus hogares toman la forma de madrigueras u hoyos en los árboles, por dentro están amuebladas como si fuesen espacios humanos, con electrodomésticos y muebles. Los animales mismos ocupan roles laborales propios del mundo de las personas, como el de abogado, periodista, vendedor de bienes raíces, entre muchos otros.
El carácter salvaje
Aunque existan como humanos, los animales de Fantastic Mr. Fox tienen una latencia salvaje, que les pide volver a su estado natural. Algunos lo ocultan mejor que otros. Mr. Fox, como declara al principio de la película, es un mamífero con enormes problemas para hacer caso omiso a sus instintos. Por eso, se mete en problemas con su familia y vecinos cada vez que decide escuchar a su corazón antes que a su cabeza.
Para ellos, lo natural es entregar todo su carácter animal a la antropomorfización. En otras palabras, prohibir la expresión de cada uno de los impulsos que les son inherentes y reemplazarlos por el pensar analítico del humano. Elogian la vida civilizada, hasta que se encuentran cara a cara con ella. Cuando los animales se enfrentan a los grandes magnates del mundo moderno, caen en la cuenta de que ellos son mucho más salvajes de lo que pensaban. Sin descanso y descuidando a sus congéneres, moverán cielo, mar y tierra por acabar con los animales, cuya única vía de escape posible será retomar su fuerza de origen.
Esperamos que te haya gustado nuestra reseña de Fantastic Mr. Fox ¿Qué otras películas que reflexionan sobre el mundo animal conoces? Queremos leerte en nuestras redes sociales.